Se trata de una infección común que puede parecer una enfermedad infantil común. El rotavirus es un virus altamente contagioso que afecta principalmente a bebés y niños pequeños, y causa diarrea intensa, vómitos, fiebre y dolor abdominal. Este virus se descubrió por primera vez en 1973 en muestras de niños que sufrían gastroenteritis. Antes de que se creara una vacuna, el rotavirus era la principal causa de diarrea intensa en bebés y niños pequeños en los Estados Unidos.
Transmisión
El virus se excreta en las heces de una persona infectada y se transmite a través del contacto directo con manos u objetos contaminados, como juguetes, superficies o utensilios. También se puede propagar al consumir alimentos o agua contaminados o por contacto cercano con una persona infectada. Es fácil contagiar a los niños, ya que pueden olvidarse de lavarse las manos.
Síntomas del rotavirus
Los síntomas de la infección por rotavirus suelen comenzar dentro de los dos días posteriores a la exposición al virus y pueden durar de 3 a 8 días. Los síntomas más comunes incluyen:
● Diarrea acuosa intensa
● Vómitos
● Fiebre
● Dolor abdominal
● Deshidratación (que puede ser grave y potencialmente mortal, especialmente en niños pequeños)
La mayoría de los niños se recuperan del rotavirus sin efectos a largo plazo para la salud; los síntomas suelen durar alrededor de una semana. Sin embargo, si se produce deshidratación, puede provocar complicaciones graves, por lo que es importante ponerse en contacto con su proveedor de atención médica de inmediato si su hijo presenta síntomas.
Prevención del Rotavirus
No se desarrollaron oficialmente una serie de vacunas hasta principios de la década de 2000. Estas vacunas se administran por vía oral y se recomiendan para bebés de dos meses de edad. El programa de vacunación generalmente incluye de dos a tres dosis, según la vacuna utilizada.
Se ha determinado que la vacuna contra el rotavirus es muy eficaz. Durante el primer año de vida, brinda entre un 85% y un 98% de protección contra enfermedades graves y hospitalizaciones, y entre un 74% y un 87% contra enfermedades por rotavirus de cualquier gravedad. La introducción de estas vacunas ha llevado a una disminución significativa en la cantidad de casos graves de rotavirus y hospitalizaciones.
Como padre, especialmente si es nuevo en esto, la salud de su hijo es su principal preocupación. Si bien el rotavirus es una enfermedad que puede afectar a su hijo, existen otras muchas con las que debe tener cuidado. Es importante identificar esta infección debido a sus síntomas, que pueden parecerse a los síntomas normales que experimenta un bebé. El rotavirus puede ser una enfermedad grave, pero puede proteger a su hijo de sus efectos con la vacunación adecuada y las medidas preventivas. Si se mantiene informado, practica una buena higiene y consulta a su proveedor de atención médica, no tendrá problemas para identificar cualquier
Fuentes:
National Library of Medicine: Rotavirus Vaccines: Effectiveness, Safety and Future Directions